La transición hacia una economía descarbonizada es un importante acelerador del crecimiento y del avance tecnológico en la industria energética, además de generar un impacto ambiental, social y económico positivo. A nivel social, se verá en la industria nuevas oportunidades de empleo y de recualificación tanto de las personas como de las comunidades, compensado la reducción de puestos de trabajo en determinados segmentos.
Apoyamos plenamente los principios de una transición justa (transición socio ecológica justa) para que nadie se quede atrás, ni siquiera a corto plazo, y somos conscientes del impacto social de nuestra estrategia climática, que representa un compromiso más amplio en línea con el enfoque del Grupo de respetar los derechos humanos a lo largo de la cadena de valor, como también se establece en nuestra Política de Derechos Humanos.
El Grupo Enel, del que es parte Enel Américas, firmó en 2019, la carta de compromiso de las Naciones Unidas con una transición justa y con la creación de empleos decentes y "verdes" al:
- promover el diálogo social con los trabajadores y sus sindicatos, respetando los derechos de los trabajadores, fomentando la protección social y proporcionando garantías salariales, de conformidad con las normas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT);
- trabajar con proveedores que respeten estos estándares, contribuyendo al mismo tiempo al desarrollo social y económico de las comunidades locales más expuestas a la transición de los combustibles fósiles a las energías renovables.